miércoles, 12 de junio de 2013

Perder el miedo y encontrar la fuerza.

Lo que realmente nos hace fuertes, es la pérdida del miedo.
La ausencia de necesitar resolver la incertidumbre.
Las ganas.
Vivir, eso nos hace fuertes y nos ayuda a perder el miedo.
Viviendo aprendes a vivir. A esperar sin estar esperando.
A que las cosas dejen de doler sin estar doliendo.
También se aprende riendo sin estar llorando, y llorando riendo.
Y se vive queriendo:
Queriendo aprender, queriendo mejorar, queriendo superarse.
Queriendo disfrutar. Queriendo aceptar. Queriendo conocer.
Queriendo conocerse...
Conociendo y conociéndose. Aceptando y aceptándose... Disfrutando.
Superando y superándose. Mejorando y mejorándose... Aprendiendo.
Queriendo a los demás, pero sobretodo, queriéndose a uno mismo.
Y queriendo vivir.
Así se vive.
Y viviendo, se pierde el miedo.
Es relativo ¿verdad? que para perder el miedo sea necesario vivir, y para poder vivir necesitemos perderlo.
Contradictorio y cierto. Me gusta.
Conócete, acéptate... y justo después de aceptarte, cuando vayas a superarte, de repente habrás perdido el miedo y estarás viviendo.
Entonces... vive. Sin miedo, sin incertidumbre... sin más.

1 comentario:

  1. Y a vivir la vida señores que son dos días! :D

    Si quieres también puedes seguirme por twitter (@maay_gt)

    http://elchicodelmetro.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar